Ante el incremento de tomas clandestinas y el contexto de crisis hídrica en la entidad, el Partido Verde Ecologista de México (PVEM), presentó una iniciativa de reforma legal para tipificar como delito grave la alteración, desvío o sustracción ilegal del suministro de agua potable, ante el Congreso mexiquense.
José, Pepe, Couttolenc, dirigente del PVEM en el Estado de México, ha señalado la importancia de atacar la crisis hídrica que se vive en la entidad.
“Quien lucra de manera ilegal con el agua vulnera un derecho fundamental, especialmente de quienes más lo necesitan. En el contexto de la crisis hídrica que vivimos, permitir estas prácticas es una forma de negligencia institucional”, declaró Couttolenc, también coordinador legislativo de la bancada verde.
De acuerdo con cifras oficiales, entre 2019 y 2022 se detectaron 14,836 tomas clandestinas de agua en el Estado de México, posicionándolo como la segunda entidad con mayor incidencia de “huachicoleo de agua” en el país, solo por debajo de Aguascalientes.
Se estima que en todo el país se sustraen de manera ilegal alrededor de 4,000 litros de agua por segundo.
En marzo de 2025, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y la Guardia Nacional clausuraron 11 puntos de extracción ilegal de agua en los municipios de Texcoco y Chicoloapan, donde se presume que se extraía agua para su venta.
La iniciativa propone que el robo de agua sea perseguido de oficio y establece penas de hasta seis años de prisión. Se sancionaría con entre 2 y 6 años de cárcel y multas de 200 a 1,000 UMAs a quienes alteren o desvíen el suministro de agua sin autorización; con 1 a 3 años y multas de 100 a 500 UMAs a quienes extraigan agua de fuentes no autorizadas; y con 2 a 6 años y multas de 500 a 1,000 UMAs a quienes la distribuyan ilegalmente desde fuentes no oficiales.
Con esta propuesta, Couttolenc, en conjunto con el Grupo Parlamentario del PVEM, pretenden sumar una acción más a su agenda legislativa enfocada en el cuidado del medio ambiente y en la protección de los derechos de las y los mexiquenses al acceso equitativo y seguro al agua potable.
Cortesía de El Heraldo de México.
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