Ante el riesgo inminente de impacto de Erick como huracán en la Costa Chica de Guerrero, las autoridades militares y de Protección Civil urgieron a más de ocho mil familias a evacuar sus hogares en diez municipios de la zona costera.
“Tiene que convencerse a las familias donde hay niños, menores de edad, recién nacidos y adultos mayores. Ellos pueden ser los más vulnerables en estos momentos”, dijo el general de Brigada Andrés Ojeda, comandante de la 27 zona militar.
Los alcaldes de Cuautepec, Las Vigas, Juchitán, Cuajinicuilapa, Florencio Villareal, San Marcos, San Nicolas, Marquelia y Copala, identificaron 21 zonas con mayor peligro de inundación y deslave. Los albergues ya están habilitados y cuentan con comida, colchonetas, cobertores, hasta médicos, solo faltan las familias.
“El llamado a la población es mediante el perifoneo, estar cerca de las comunidades donde los presidentes municipales manifestaron que no desean dejar sus casas, hay comunidades que dijeron que dijeron que no se va a salir definitivamente, que tiene que llevarse el apoyo y ahí es donde vamos a insistir, para que no sea un riesgo y a la vez garantizar su integridad”, añadió el mando militar.
Se niegan a abandonar sus casas
En Florencio Villarreal, al menos 500 familias de las comunidades Los Tamarindos, Llano de la Barra, Pico del Monte, Cuatro Bancos y Las Ánimas corren el riesgo de inundarse; sin embargo, por temor a perder sus patrimonios, se niegan a abandonar sus hogares.
“Año con año hemos visto que las comunidades en general les da un poco de trabajo soltar el apego a las cosas materiales, a sus hogares, por eso se va a llamar primero a ocupar las viviendas de algún familiar que está en una zona fuera de peligro”, expuso Jesús Santos, director de PC municipal.
Por la experiencia de los huracanes Otis y John, las autoridades se dicen preparadas, pero ahora su mayor reto es convencer a los pobladores a que evacuen las zonas que representan peligro para sus vidas.
“Trabajamos toda una vida y nos duele dejarlas”, reconoce Analenis Reséndiz, alcaldesa de Juchitán, donde se prevé se registre el mayor número de daños por el impacto de Erick. La edil señaló que el municipio se prepara con despensas para tres o cuatro días, tiempo que estima tardaría en llegar la ayuda cuando la zona quede incomunicada.
Más de 850 efectivos del Ejército y Guardia Nacional fueron desplegados desde los municipios de Petatlán, Atoyac de Álvarez y Zacatula en la región Costa Grande hacia la Costa Chica como parte del Plan DN-III-E que se activó desde la mañana de este 17 de junio.
Cortesía de El Heraldo de México.
Dejanos un comentario: