CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Diez de los 14 sujetos detenidos durante la balacera ocurrida el martes pasado en Topilejo, alcaldía Tlalpan, fueron trasladados este jueves al penal de Santa Martha Acatitla en medio de un fuerte dispositivo de seguridad.
El convoy conformado por camiones blindados, conocidos como Rino, patrullas, camionetas y motocicletas, fue seguido mediante monitoreo por las cámaras del C2 y C5, desde la Fiscalía en avenida Jardín, en la alcaldía Azcapotzalco, hasta Iztapalapa.
Los detenidos, presuntamente pertenecientes a una célula criminal bajo el mando de Ovidio Guzmán, comparecerán ante un juez de control quien definirá si los vincula o no a proceso.
Se espera que los presuntos delincuentes enfrenten la justicia por la probable comisión de los delitos de homicidio en grado de tentativa y asociación delictuosa; portación de armas y cartuchos; secuestro agravado, contra la salud y cohecho.
La Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX) informó que los otros cuatro sujetos que habían sido detenidos tras el enfrentamiento, quedaron en libertad al no encontrase elementos que acrediten su posible participación en los hechos.
Fue el propio titular de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), Omar García Harfuch, quien informó que varios de los detenidos son originarios de Sinaloa y pertenecen a un cártel asentado en ese estado.
“Estas personas, en la primera entrevista, dicen que no son de la Ciudad de México, algunos son de Sinaloa, lo cual quiere decir que vienen de este grupo de Sinaloa… Todo indica de que son de un grupo proveniente de Sinaloa”, dijo en conferencia la noche del martes.
Ante la insistencia de la prensa para saber si eran integrantes del Cártel de Sinaloa, agregó: “Creemos definitivamente que es un grupo proveniente de Sinaloa. No quisiera especular. Uno dijo que es de Culiacán, otros de Sinaloa. Todo indica que es de un grupo criminal que opera en esa zona” del país.
El operativo realizado el martes pasado tras una denuncia ciudadana que reportaba la existencia de personas secuestradas, dejó como saldo cuatro víctimas liberadas, 14 personas detenidas y dos policías heridos, uno de ellos, de gravedad.
También fueron aseguradas 10 armas largas, incluida una Barret calibre 50 y una ametralladora de alto poder, así como 12 granadas, 3 armas cortas, 74 cargadores, “bastante droga” y chalecos balísticos.
El jefe policiaco informó que las cuatro personas rescatadas fueron halladas en buenas condiciones de salud, aunque con algunos golpes.
Harfuch comentó que una las personas privadas de su libertad llevaba 20 días encerrada, y las otras tres, desde la mañana de este martes. El jefe policiaco aseguró que no había denuncia por su secuestro con un fin monetario, lo que hacía posible que fueran presuntos delincuentes de otra célula criminal.
No obstante, el funcionario dijo que las personas secuestradas serían tratadas como víctimas en tanto se realizan las investigaciones de la Fiscalía capitalina.
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