William Scull por decisión unánime para convertirse nuevamente en campeón indiscutible de peso supermediano.
Álvarez, de 34 años, es campeón mundial de cuatro pesos y llegó a la pelea con los títulos de la AMB, el CMB y la OMB en 168 libras.
Le despojaron del cinturón de la FIB en julio pasado al negarse a hacer una defensa obligatoria contra Scull. Álvarez se convirtió en bicampeón indiscutible de la división por segunda vez, con una puntuación de 115-113, 116-112 y 119-109 para los jueces.
La pelea contra el campeón de la FIB, Scull, no estuvo a la altura de las expectativas. Momentos después de anunciarse la decisión, comenzó la promoción de una pelea propuesta para el 12 de septiembre entre Álvarez y Terence Crawford.
Álvarez peleaba fuera de Estados Unidos o México por primera vez y tuvo que adaptarse a muchos aspectos, incluyendo la zona horaria. Los peleadores subieron al ring y los himnos comenzaron alrededor de las 6:20 a. m. hora local en Riad, programados para que coincidieran con el horario estelar de la costa oeste de Estados Unidos.
Los primeros asaltos fueron lentos, con ambos boxeadores tanteando el alcance y la intensidad fue bajando gradualmente. Scull lanzó muchos más golpes, pero apenas conectó ninguno. Álvarez, en cambio, mantuvo la paciencia y conectó potentes golpes al cuerpo.
Scull siguió moviéndose, esquivando y arrastrando los pies, frustrando a Álvarez, quien luego dijo que odiaba pelear contra ese estilo de boxeador.
Cortesía de Proceso.
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