Un hombre que viajaba a bordo de una bicicleta eléctrica tipo scooter murió atropellado la tarde de este jueves 12 de diciembre cuando circulaba a bordo de avenida Cuitláhuac, en la esquina con la calle de Nueces, de la alcaldía Azcapotzalco.
De acuerdo con los reportes, la víctima fue arrollada por un tráiler que circulaba en la zona. Servicios de emergencia se hicieron presentes en el lugar para acordonar la zona y esperar la llegada de los peritos de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México.
Usuarios de redes sociales señalaron que esa zona resulta peligrosa por el tránsito de vehículos pesados de carga, así como la falta de infraestructura para la circulación de las bicicletas. Sin embargo, el vehículo siniestrado es un scooter eléctrico equipado con una silla, por lo que su circulación en las ciclovías está condicionada a que mantengan la velocidad inferior a 25 kilómetros por hora que establece el reglamento.
Hasta el momento se desconoce si el conductor del tráiler implicado en este incidente vial ya fue detenido a causa de este hecho que dejó una persona sin vida; las imágenes únicamente muestran la zona acordonada por elementos de la Policía de la Secretaría de Seguridad Ciudadana en espera de los servicios ministeriales, que abrirán la indagatoria pertinente y levantarán el cuerpo.
Usuarios de “motobicis” en constante peligro
En los últimos meses se ha registrado un incremento en accidentes de tránsito en la Ciudad de México, donde vehículos eléctricos de tipo “motobici” han estado involucrados, con consecuencias fatales para sus conductores. Se desconocen cifras exactas de este fenómeno, pues al no estar estos vehículos catalogados ni como motocicletas ni como bicicletas no hay una estadística confiable.
Estos vehículos no encajan en la categoría de bicicletas ni de motocicletas según el Reglamento de Tránsito vigente, lo que crea un vacío legal y pone en riesgo a los usuarios y a otros conductores. Lo anterior debido a que carecen de pedales y pueden alcanzar velocidades superiores a los 25 km/h, lo que las convierte en un peligro en vías compartidas con ciclistas y peatones.
Además, sus ocupantes no están obligados a portar ningún tipo de equipo de seguridad ni requieren de licencia para circular, como sí sería el caso si utilizaran una motocicleta. Sin embargo, las velocidades que alcanzan elevan el riesgo respecto a una bicicleta.
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Cortesía de El Heraldo de México.
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