WASHINGTON (apro).– El secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, y el canciller mexicano, Juan Ramón de la Fuente, conversaron por teléfono para indicar el compromiso de los dos países en el fortalecimiento de la lucha contra el narcotráfico y en seguridad.
Hablaron “para impulsar nuevos avances en nuestras prioridades en materia de seguridad, incluidos los esfuerzos para proteger la frontera entre Estados Unidos y México, desmantelar las organizaciones criminales y los cárteles del narcotráfico, y para promover la seguridad económica en América del Norte”, señalo Tammy Bruce, vocera del Departamento de Estado en un escueto comunicado de prensa.
El intercambio de ideas y promesas de cooperación con De la Fuente ocurrió a una semana de que Rubio declarará ante el Congreso federal de su país que en México impera una situación de violencia, y como ejemplo puso el caso del asesinato de dos asesores de Clara Brugada, la jefa de gobierno de la capital mexicana.
“Ambos coincidieron en la necesidad de intensificar la cooperación entre nuestros dos países, mejorando la seguridad y el bienestar de los estadunidenses y mexicanos”, concluyó Bruce.
El Departamento de Estado evitó indicar si Rubio abordó con De la Fuente el tema de las elecciones judiciales que se llevarán a cabo en México este domingo 1 de junio, y también sobre la insistencia mexicana de que Estados Unidos haga más para parar el tráfico de armas estadunidenses que empoderan a los cárteles del narcotráfico.
De la llamada telefónica de hoy, la Secretaría de Relaciones Exteriores resaltó que De La Fuente reiteró el rechazo del gobierno de México al impuesto de 3.5% que el gobierno de Trump pretende imponer a las remesas y habló con Rubio sobre la visita que legisladores mexicanos harán a Washington la próxima semana para abordar este tema.
¿De La Fuente y Rubio no habían tenido una conversación desde que el canciller mexicano viajó a Washington, el pasado 27 de febrero, para acompañar a los integrantes del gabinete de seguridad de Claudia Sheinbaum Pardo en una reunión sobre seguridad con sus homólogos de la administración Trump.
Desde que asumió las riendas de la Cancillería, De La Fuente se ha mantenido al margen de la relación con el gobierno de Estados Unidos, que se ha trasladado hacia la Presidencia de la República, la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) –por los golpes a las organizaciones criminales– o la Secretaría de Economía (SE), por los diferendos en materia comercial.
La participación más relevante del exrector de la UNAM en la relación bilateral estos últimos meses fue una llamada telefónica que sostuvo el pasado 26 de febrero con Christopher Landau, el exembajador de Estados Unidos en México y actual subsecretario de Estado de la administración Trump.
Cortesía de Proceso.
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