Una niña de dos años fue hallada muerta y sepultada al interior de su domicilio en la comunidad de San Pablo, en el municipio de Chimalhuacán, donde el principal sospechoso es su padre, quien presuntamente la atacó con un machete antes de enterrarla bajo los sillones de la sala.
El hallazgo ocurrió el miércoles 2 de julio, luego de que los abuelos maternos acudieran a visitar a sus dos nietas; sin embargo, en el lugar sólo encontraron a la mayor, de aproximadamente cuatro años, quien presentaba múltiples moretones en el cuerpo.
La menor relató a sus abuelos que su padre había golpeado a ambas y que había matado a su hermana menor con un machete, para después enterrarla en la sala, en uno de los momentos más complicados para los abuelos, quienes quedaron conmocionados por el testimonio.
Por ello tras escuchar el testimonio, los abuelos regresaron al inmueble ubicado en la calle Villa Guerrero, esquina con Cerrada Loma Bonita al mover los muebles, detectaron tierra removida y, al escarbar, localizaron el cuerpo sin vida de la menor de dos años de edad.
¿Qué pasó con la menor asesinada por su papá?
La madre, identificada como Alma Sofía “N”, de 23 años, y su pareja sentimental, ya no se encontraban en el lugar, siendo los principales sospechosos del terrible suceso vivido en la colonia San Pablo del municipio de Chimalhuacán, en el Estado de México siendo este un caso muy sensible.
Elementos de la Policía Municipal de Chimalhuacán acudieron al sitio y acordonaron el área para posteriormente dejar que los peritos de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) realizaran el levantamiento del cuerpo e iniciaran las investigaciones correspondientes.
De acuerdo con los abuelos, el padre de las niñas no tenía empleo, era consumidor de sustancias ilícitas y ejercía violencia familiar asimismo vecinos del lugar también señalaron que en diversas ocasiones habían denunciado maltrato contra las menores y hasta el momento, las autoridades continúan con la búsqueda de los padres, quienes se encuentran prófugos.
Cortesía de El Heraldo de México.

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