Ana María “N”, de 53 años, fue vinculada a proceso por el delito de maltrato a animales domésticos y silvestres, tras ser detenida en la colonia Jacarandas II, en la capital potosina, donde mantenía a 14 perros en condiciones de extrema desnutrición y un entorno insalubre.
La Fiscalía General del Estado de San Luis Potosí (FGESLP) informó que, durante la audiencia celebrada este jueves, un Juez de control decretó prisión preventiva justificada para la imputada, quien permanecerá recluida en el penal correspondiente.
La señalada fue detenida por la Guardia Civil Estatal (GCE) en la colonia Jacarandas II, luego que activistas y vecinos enfrentaran a esta persona, tras percatarse que tenía a los perros en severo grado de desnutrición, con diversas lesiones y en un entorno insalubre, pues desde el exterior se percibía el “olor a muerto”.
“En el lugar se encontraron cuatro perritos más sin vida y varias piezas óseas de más animales”, detalló la Fiscalía.
Activistas y vecinos destaparon el caso, logrando el arresto de la mujer
El caso salió a la luz el pasado 7 de junio, cuando la Guardia Civil Estatal (GCE) rescató a los caninos de una vivienda en la colonia Lomas de Santiago, tras un reporte ciudadano. Activistas, liderados por Fátima Ramírez Martínez de la Fundación “Huellitas”, denunciaron que los animales vivían en condiciones infrahumanas, rodeados de restos óseos y cuatro perros sin vida, algunos con signos de haber sido quemados.
Las imágenes difundidas en redes sociales mostraron a los canes demacrados, apenas capaces de moverse entre desechos y un fuerte olor a descomposición. Fátima Santiago también publicó fuertes imágenes en las que se observa a los perros muertos, los cuales además habrían sido calcinados.
Tras la intervención, los perros rescatados fueron trasladados a clínicas veterinarias en la capital y en Soledad de Graciano Sánchez, donde reciben atención médica. La asociación “Salvando Huellitas” gestionó hogares temporales para los animales en la colonia Simón Díaz.
Ramírez Martínez señaló directamente a Ana María “N” y a su hija, Constanza Monserrat “F”, como responsables, acusándolas de recoger perros abandonados e incluso robar mascotas de vecinos, sin brindarles los cuidados necesarios. Según la activista, esta práctica ya había sido denunciada previamente en el fraccionamiento Valle de Jacarandas, sin que las autoridades de Bienestar Animal actuaran.
Fiscalía consigue vinculación a proceso
Durante la audiencia, la FGESLP presentó pruebas contundentes, incluyendo el estado de los animales y las condiciones del domicilio, lo que llevó a la vinculación a proceso de Ana María “N”. La autoridad judicial aceptó la solicitud de prisión preventiva, considerando la gravedad de los hechos.
La imputada podría enfrentar penas conforme al artículo 317 del Código Penal del Estado, que estipula de 1 a 2 años de prisión y multas de 200 a 400 días de UMA por la muerte de animales, además de hasta 3 años de inhabilitación para actividades relacionadas con su cuidado. Por abandono con riesgo a la vida, se suma una posible sanción de 6 meses a 1 año de prisión.
Cortesía de El Heraldo de México.
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