CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Durante la sesión del Consejo General del Instituto Nacional Electoral (INE), los representantes de Morena y del PAN intercambiaron acusaciones de nepotismo y de redes de intereses familiares en Durango, estado gobernado por el PRI que tendrá elecciones locales el próximo 1 de junio para renovar 39 presidencias municipales, 39 sindicaturas y 326 regidurías.
El representante de Morena ante el INE, Guillermo Santiago Rodríguez, aseveró que en el municipio de Otáez –cuya población ronda los 5 mil habitantes–, el consejo electoral está captado por la familia de la candidata PRI-PAN, Rocío Mendoza Paniagua.
“Esta no es una anécdota local, es un claro conflicto de interés real, patente y documentado que amenaza la objetividad de cada decisión en el municipio de Otáez, Durango; desde la custodia de las boletas, hasta el cómputo municipal”, aseveró el político.
El representante del PAN, Víctor Hugo Sondón Saavedra, reviró al morenista que su partido detectó “el parentesco del presidente del Organismo Público Local Electoral (OPLE) de Durango con su candidato de Morena”, por lo que acusó al partido guinda de actuar con “parcialidad” y con “doble rasero”.
Ni uno ni otro habló de la polémica afiliación de Enrique Benítez, figura histórica del PRI en Durango, cuyo padrino en Morena fue Andrés Manuel López Beltrán, el hijo del expresidente Andrés Manuel López Obrador. Este gesto desató burlas entre las voces críticas de Morena, y molestias en la corriente intelectual del partido.