CIUDAD DE MÉXICO (arpo).- En el mismo día en que el presidente Donald Trump anunció que subiría los aranceles al acero al 50%, en México la Secretaría de Economía publicó un nuevo requisito que afectará a más de la mitad del total de las exportaciones que salen del país bajo el programa de maquiladoras, conocido como IMMEX.
De acuerdo con el Diario Oficial de la Federación, se trata de un cambio en las reglas para poder vender productos mexicanos al extranjero.
Antes de exportar ciertos bienes —como computadoras, tequila, cerveza, pantallas, piezas de autos o maquinaria— las empresas deberán tramitar un “aviso automático” ante la Secretaría de Economía. Este trámite puede demorar, y, aunque en teoría no debería negarse, sí podría generar retrasos.
“El presente Acuerdo tiene por objeto establecer un esquema de aviso automático de exportación para las mercancías que se clasifican en las fracciones arancelarias de la Ley de los Impuestos Generales de Importación y de Exportación”, se lee en el documento oficial publicado este 3 de junio.
La lista de productos alcanzados es extensa y responde a los cambios generados por Donald Trump; van desde bebidas como cerveza y tequila, hasta metales preciosos como el oro.
También abarca piezas industriales, motores, sistemas de aire acondicionado, convertidores catalíticos, cables, pantallas planas, computadoras portátiles, memorias electrónicas y partes de maquinaria. Incluso se incluyen equipos médicos, instrumentos científicos y mobiliario de oficina o uso industrial.
Al respecto, Proceso tuvo acceso a un documento interno del Comité de Comercio Exterior y Aduanas del Consejo Nacional de la Industria Maquiladora y Manufacturera de Exportación (Index), en el que se advierte que este nuevo trámite afectará directamente al sector exportador.
“Según el análisis preliminar del Comité, esta medida impactará a más del 50% del volumen total de exportaciones de la industria”, señala el texto.
De manera interna, Index informó a sus afiliados que ya analiza el impacto del acuerdo. Y aunque aún no se conocen todos los detalles técnicos, ya se anticipan complicaciones operativas.
Uno de los principales problemas es que el sistema que usan muchas maquiladoras para hacer sus trámites —llamado pedimento consolidado— permite agrupar varias exportaciones en un solo paquete. Ahora, con esta nueva regla, podría tener que enviar un aviso por cada parte incluida, lo que multiplicaría la carga de trabajo.
“En promedio, cada pedimento consolidado contiene alrededor de 20 remesas, por lo que la cantidad de avisos que tendría que autorizar la Secretaría de Economía aumentaría de forma exponencial”, advierte el comité.
Además, la falta de claridad en cómo funcionará el nuevo sistema genera incertidumbre.
“La falta de claridad en los lineamientos y requisitos, así como el plazo de resolución de 10 días, generan un alto riesgo operativo, provocando posibles retrasos en las operaciones logísticas y un riesgo de pérdidas económicas para las empresas”.
Por ello, Index ya inició conversaciones con la Secretaría de Economía para buscar una forma de implementar la medida sin afectar el flujo comercial del país. Sin embargo, hasta ahora, no se han dado a conocer los formatos ni las reglas específicas que deberán seguir las empresas.
Una fuente anónima del sector señaló a este medio de comunicación, que si la medida no se aclara pronto, miles de productos mexicanos podrían tardar más en salir del país. Eso podría generar cancelaciones, pérdida de contratos internacionales, y eventualmente, “afectar empleos en momentos de tensión con los Estados Unidos”.