El presidente de la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI) Sección San Cristóbal, Gabriel González Tovilla, aseguró que, aunque la ciudad mantiene una alta demanda en la compra y arrendamiento de inmuebles, actualmente se enfrenta a una mayor competencia debido al incremento en la oferta. Indicó que cada vez hay más personas que ponen sus propiedades en venta o renta. Esto ha generado que los compradores tengan más opciones y que los propietarios deban competir más, lo que no implica malbaratar, pero sí ajustar los precios a un mercado más exigente.
La demanda sin duda de adquirir una vivienda es alta, especialmente en el segmento de casa habitación, dado el déficit habitacional a nivel nacional. Sin embargo, la escasa oferta de vivienda nueva y accesible limita a muchos compradores, especialmente a quienes intentan utilizar créditos hipotecarios. Por ejemplo, hay cien compradores con crédito aprobado buscando una casa entre los 2.5 y 3 millones de pesos, pero solo hay 15 o 20 propiedades disponibles.
Además, que los trámites para la construcción de vivienda nueva son largos y costosos, lo cual incrementa el valor final de las casas, dificultando su acceso para la mayoría de la población. Con relación a los fraudes comentó que existen los que actúan con dolo y el que intenta ayudar a un familiar sin tener el conocimiento. Llamó a acudir con profesionales certificados y no improvisar al momento de comprar o vender una propiedad para ello existe un directorio de los integrantes de Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios y recomendó por ningún motivo firmar un contrato ni entregar anticipos sin tener asesoría.
¿Cómo evitar un fraude inmobiliario?
Evitar un fraude inmobiliario requiere precaución, información y el acompañamiento de profesionales certificados. Estos delitos ocurren cuando una persona intenta vender, rentar o prometer una propiedad sin tener derechos legales sobre ella, o bien cuando se piden anticipos sin garantía ni documentación adecuada.

Lo primero es verificar que la persona que ofrece el inmueble esté legalmente facultada para hacerlo. Pide una copia de la escritura, credencial oficial y un comprobante reciente de predial. Si es posible, acude al Registro Público de la Propiedad para confirmar que no existan gravámenes o problemas legales.
Nunca entregues dinero sin antes firmar un contrato revisado por un profesional. Evita pagar anticipos en efectivo o sin comprobante. Si alguien te presiona para cerrar el trato rápidamente, es una señal de alerta.
Consulta a un asesor certificado por la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI) o una notaría. Ellos conocen el proceso legal y pueden ayudarte a revisar contratos, valuaciones y trámites. También asegúrate de que la propiedad esté bien ubicada y no tenga problemas con el uso de suelo, adeudos o invasiones.
En operaciones de compraventa o arrendamiento, elige canales formales. Desconfía de ofertas demasiado atractivas o de personas que no permiten visitas previas ni muestran documentación. Finalmente, si tienes dudas, consulta a un abogado especializado. Comprar o rentar una propiedad es una decisión importante y no debe improvisarse. La prevención es clave para evitar caer en manos de estafadores y proteger tu patrimonio.
Cortesía de El Heraldo de México.