Los miembros del órgano resolutivo emitieron una declaración de prensa en la que se refirieron a la agresión como “atroz y cobarde” y reafirmaron que el terrorismo en todas sus formas y manifestaciones constituye una de las principales amenazas a la paz y seguridad internacionales.
El ataque se perpetró cuando un grupo de individuos armados emboscó una caravana de oficiales de policía y de seguridad egipcios en esa zona, localizada a menos de 150 kilómetros al suroeste de El Cairo.
El Consejo de Seguridad subrayó la necesidad de presentar ante la justicia a los organizadores, patrocinadores y ejecutores de este tipo de atentados y urgió a todos los Estados a cooperar con el gobierno de Egipto y otras autoridades relevantes en este sentido, según las disposiciones de las leyes internacionales y las resoluciones del máximo órgano de seguridad de la ONU.
Asimismo, reiteró que todos los actos de terrorismo carecen de justificación, independientemente de su motivación y de quién, dónde y cuándo se cometan.
Los integrantes del Consejo también reafirmaron la urgencia de que todos los Estados combatan el terrorismo por todos los medios, ajustándose siempre a las leyes internacionales humanitarias, de derechos humanos y de refugiados.
Por otra parte, ofrecieron sus condolencias a los familiares de las víctimas y al gobierno egipcio y desearon la pronta recuperación de los lesionados.
Cortesía de Naciones Unidas.