CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Diego “N”, el joven de 19 años acusado de alterar con inteligencia artificial miles de fotos de estudiantes del Instituto Politécnico Nacional (IPN) para fines sexuales, recibió una sentencia condenatoria de cinco años en prisión, por un caso distinto a los que fueron promovidos por la Asamblea Colectiva de Justicia Digital del IPN.
En el Reclusorio Preventivo Varonil Oriente, de acuerdo con reportes periodísticos, el pasado 21 de mayo la autoridad judicial dio lectura a la sentencia contra Diego “N” por el delito de trata de personas en su modalidad de pornografía infantil.
Se trata de la primera sentencia condenatoria que recibe el exestudiante de mercadotecnia en la Escuela Superior de Comercio y Administración (ESCA), pues además enfrenta otras seis carpetas de investigación abiertas en su contra y ya fue absuelto en el caso de dos denunciantes, también estudiantes del IPN.
Hace más de cinco meses, el juez Francisco Salazar Silva lo absolvió por los dos casos mencionados, ya que determinó que no había elementos suficientes para demostrar que el mencionado alteró las fotografías con inteligencia artificial, pues no hubo un testigo que pudiera acreditar su responsabilidad.
Luego de que se dio a conocer la noticia de la sentencia condenatoria, la abogada de las jóvenes estudiantes, Valeria Martínez, dijo a medios de comunicación que la determinación del juez significa una “esperanza” y una “victoria” para las víctimas: “Aunque no es una pena alta, como lo quisieran, sí les da una esperanza de saber que su agresor puede ser sentenciado por el delito contra la intimidad sexual.”
La representante local consideró: “ojalá que la Fiscalía pueda apelar y se aumente la pena, pero si no, al menos ya es el primer delito por el que es sentenciado”.
El 6 de octubre de 2023, Diego “N” fue sorprendido con una tableta digital que contenía fotografías de sus compañeras alteradas con inteligencia artificial para fines sexuales.
Según las investigaciones que realizó la Fiscalía General de Justicia de Ciudad de México (FGJCDMX), el dispositivo electrónico contenía 166 mil fotografías alteradas, así como 20 mil videos y recopilaciones de fotografías entre las que al menos el 40% eran de mujeres entre los 17 y 25 años, estudiantes del IPN.
El caso despertó el descontento de la comunidad estudiantil que se manifestó para exigir justicia para las víctimas, pues se trata del caso más representativo en México sobre violencia digital con el uso de inteligencia artificial y fines de explotación sexual.
Aún más, tras la detención de Diego “N”, las víctimas afirmaron que en la casa de estudios existía una organización que operaba a través del servicio de mensajería instantánea Telegram, para la venta y reproducción de contenidos íntimos no consensuados.
Cortesía de Proceso.