Las lluvias registradas la tarde de ayer en Tuxtla Gutiérrez dejaron un total de 11 incidentes atendidos por Protección Civil Municipal. Eder Mancilla, secretario de Protección Civil señaló que, entre los principales, se reportaron cuatro árboles caídos en distintas colonias, un encharcamiento con vehículo detenido en el Libramiento Norte Oriente, así como el desbordamiento de dos arroyos: uno en Lomas del Oriente y otro en el Fraccionamiento La Salle, a la altura de una agencia automotriz.
También se atendió el levantamiento de material de arrastre sobre la Carretera Panamericana, un rescate en el bulevar Ángel Albino Corzo y un corto circuito en la colonia Rivera Cerro Hueco. Las autoridades reiteraron su llamado a la ciudadanía a mantenerse informada, tomar precauciones ante el pronóstico de más lluvias y reportar cualquier emergencia a los números 911 y 072.
No se reportaron inundaciones en viviendas, caída de bardas o postes, ni láminas en riesgo, lo que permitió una atención oportuna de los eventos sin mayores consecuencias.
¿Qué hacer cuando se desborda un arroyo?
En caso de desbordamiento de arroyos, es fundamental actuar con rapidez y precaución. Primero, aléjate de inmediato del cauce o zona inundada, ya que la corriente puede ser peligrosa y arrastrarte fácilmente, no intentes cruzar calles con agua, ya sea caminando o en vehículo, si estás en casa y el agua comienza a subir, corta la electricidad y el gas, y dirígete a un lugar elevado y seguro.

Escucha las indicaciones de Protección Civil a través de radio, redes oficiales o altavoces, y reporta emergencias al 911 o 072. Mantente informado y ten preparada una mochila de emergencia con documentos, agua, linterna, radio y medicamentos esenciales, después del evento, no regreses a tu hogar hasta que las autoridades lo autoricen; evita el contacto con cables eléctricos caídos, y desinfecta todo lo que haya estado en contacto con el agua. La prevención y la respuesta rápida pueden salvar vidas.
¿Cuáles son las causas por las que se desbordan los arroyos?
Los desbordamientos de arroyos son fenómenos frecuentes durante temporadas de lluvias intensas, y suelen estar relacionados con una combinación de factores naturales y humanos. Una de las principales causas es la acumulación excesiva de agua por lluvias torrenciales que superan la capacidad de los cauces naturales. Cuando un arroyo recibe más agua de la que puede transportar, se desborda y provoca inundaciones.
Otra causa importante es la obstrucción de los cauces por basura, escombros, ramas o incluso construcciones ilegales. Estos elementos impiden el flujo normal del agua, generando taponamientos que desvían el cauce hacia zonas urbanas o habitacionales. La deforestación también agrava el problema, ya que sin vegetación, el agua escurre más rápido hacia los arroyos en lugar de filtrarse en el suelo.
El crecimiento urbano desordenado es otro factor clave. Cuando se construyen viviendas o caminos cerca de arroyos o sobre zonas inundables, se reduce el espacio disponible para el desalojo natural del agua, además, el pavimento impermeable impide que el agua se absorba, aumentando el escurrimiento superficial. En conjunto, estos factores incrementan la vulnerabilidad de las zonas urbanas ante las lluvias fuertes, haciendo que los arroyos se desborden con mayor frecuencia y provoquen daños materiales y riesgos a la población.
Cortesía de El Heraldo de México.