SALTILLO, Coah., (apro) .- El partido que intentó revivir políticamente a Humberto Moreira Valdés “rejuveneció” con nuevo nombre, pero con los mismos representantes que fueron multados por la Unidad Técnica de Fiscalización del INE, con 7.4 millones de pesos por diversas irregularidades en el 2017.
El entonces llamado Partido Joven perdió su registro en la elección de ese año cuando postuló al exgobernador de Coahuila y exdirigente Nacional del PRI como candidato plurinominal a una diputación local.
El organismo político no alcanzó el 3% de la votación que era necesaria para mantener el registro. Sin embargo, creó nuevas organizaciones sociales para buscar de nueva cuenta la autorización para convertirse en partido político.
Fue el 24 de abril que, en la sesión ordinaria, los consejeros del Instituto Electoral de Coahuila aprobaron conceder el registro como partido político a la organización denominada “Joven el Partido de la Gente”, eslogan que identificó al gobierno de Moreira Valdés, para identificarse como “Nuevas Ideas”.
La consejera Leticia Bravo Ostos leyó el acuerdo de la Comisión Temporal de Fiscalización de Organizaciones Ciudadanas, en el que se estableció que era procedente la solicitud de la asociación política que encabeza Orlando Israel Puente Carranza, quien junto con su padre, Edgar Puente, amigo íntimo del exgobernador coahuilense, representaron al Partido Joven.
La familia Puente buscaba la aprobación para que dos organizaciones sociales, Joven el Partido de la Gente y Nuevas Ideas, se convirtieran en partidos, pero sólo la primera cumplió con los requisitos y adquirió el nombre de la segunda.
De acuerdo con el informe, el nuevo partido, que tendrá vigencia a partir del mes de julio del presente año, llevó a cabo 29 asambleas municipales válidas que representan más de las dos terceras partes que exige la normativa.
El 14 de diciembre celebró la asamblea local constitutiva, cumpliendo con el otro requisito, y en lo que corresponde al número de militantes de tener por lo menos el 0.26% el padrón electoral que representan 6 mil 114 personas.
La organización política obtuvo, a través de la herramienta de la aplicación móvil que desarrolló el Instituto Nacional Electoral, la participación de 2 mil 604 militantes distribuidos en los 38 municipios.
En las próximas semanas el nuevo partido deberá presentar los documentos básicos donde se encontraron diversas inconsistencias, que tendrá que subsanar en un plazo no mayor a los 40 días naturales a partir de la notificación.
Historia de irregularidades
La familia Puente creó el Partido Joven en el 2012 y sobrevivió varios años gracias al trasvase de votos que obtuvo al participar en las elecciones locales en coalición con el PRI, quien tenía el apoyo de los partidos pequeños como el Socialdemócarta Independiente, Primero Coahuila, el Campesino Popular y el de la Revolución Coahuilense, los cuales perdieron el registro tras la reforma que los obligaba a obtener por sí solos el tres por ciento de la votación en la elección para gobernador.
Previo a ser partido político, operó como Organización Política Independiente que se dedicaba a invasiones de predios en Ciudad Acuña y Piedras Negras y llegó a Saltillo en los años que Moreira Valdés era presidente municipal de Saltillo. También se dedicaba al otorgamiento de “placas de cartón” a los vehículos extranjeros que circulan ilegalmente en varios municipios.
En el 2017, luego de ser detenido en España y expulsado del PRI, el Partido Joven lanzó a Moreira Valdés como su carta fuerte como candidato a la diputación plurinominal, pero no logró obtener el resultado esperado y, finalmente, el exgobernador no obtuvo el curul y el partido perdió el registro.
En el proceso de Fiscalización y posterior liquidación del organismo político, se determinaron diversas irregularidades en el manejo de las prerrogativas y multas que no liquidó y que ascendieron a más de 7 millones de pesos.
Una de ellas fue el desvío de recursos para una empresa a nombre de Edgar Puente, Inmobiliaria PUSA, y quien justificó que era por la renta del local donde estaban las instalaciones del partido.
Edgar Puente fue acusado en el 2020 de invasión de predios por empresarios de Saltillo y al no responder a las notificaciones judiciales ni presentar documentos que avalen su domicilio, se dispuso la medida cautelar de seguir el proceso al interior del Centro de Readaptación Social Varonil, pero, durante la pandemia de Covid-19, se le otorgó el beneficio de llevar el proceso en libertad.
Durante estos años, la familia se ha dedicado al sector de la construcción e inmobiliario, al igual que Humberto Moreira Valdés y sus hijos, Rubén Humberto y Joaquín, quienes manejan al menos seis empresas, algunas relacionadas al mismo sector, como Coahoxe, Nuevo Milenio Saltillense, Los Tres Encinos de Arteaga y Villas de la Vid.
